Anunciada victoria

La Selección Argentina masculina le ganó, como era previsible, a México por 31-16 en el primer partido correspondiente a los Juegos Panamericanos de Guadalajara. El único atenuante para que el resultado no fuera tan abultado era que el conjunto verde es el local en esta competencia y que, sumado al empuje de su gente, podía hacerle algo de fuerza a los Gladiadores para no pasar vergüenza. Hecho que no ocurrió.

En el ataque argentino no hubo grandes destacados ya que el entrenador Eduardo Gallardo rotó mucho a los jugadores para darle minutos en cancha a sus dirigidos. Se podría puntualizar en la falta de definición aunque obviamente no es para nada preocupante cuando un equipo gana por 15 goles de diferencia. Sí, falta de definición acabé de decir y espero que no te resulte tan desacertado este punto. Es que el arquero mexicano Daniel Romero, que hasta se dio el gusto de hacer un gol casi de arco a arco, atajó más de diez pelotas en todo el encuentro y esto hizo que la Albiceleste no pudiera convertir en el inicio del segundo tiempo y que México se le acercara aunque sea un poco en el tanteador. Pero igualmente, nunca se corrió algún riesgo serio de que el cotejo se convierta en aunque más no sea peleado.

Sí hubo puntos destacados en la defensa argentina porque el veterano Cristian Platti junto a Pablo Portela y Leonardo Querín cumplieron con su tarea de ayudar al arquero Matías Schulz, y luego a Fernando García, para que la pelota ingrese lo menos posible en su propio arco. Esta buena defensa se dio principalmente en el primer tiempo ya que los mexicanos sólo lograron concretar cinco goles. En el complemento se bajó un poco el nivel de intensidad en el marcaje ya que a los Gladiadores les convirtieron más de la mitad que en la primera parte, 11 tantos. Pero es entendible porque en un partido tranquilo como este no es necesario estar al 100 por ciento los 60 minutos de juego ya que de esta manera se guardan energías y se cuida el estado físico para los siguientes encuentros.

Escasos puntos flojos fueron los que mostró la Argentina ante un rival que dejó bastante que desear. Es que los de verde perdieron pelotas en ataque de maneras muy infantiles, había jugadores que les costaba picar la pelota y no sabían que hacer con ella. Aunque, el jugador más destacado en ataque fue el lateral izquierdo Marcial Acuña quien acudió permanentemente, dentro de las pocas oportunidades claras de gol, a su buen lanzamiento externo. Esas pequeñas falencias que mostraron los dirigidos por Gallardo se podrán mejorar en el próximo partido del martes a las 17 contra Estados Unidos en transmisión en vivo por TyC Sports. El conjunto norteamericano era a priori el candidato a llevarse la medalla de bronce junto a Chile, ya que es muy probable que la final sea entre Argentina y Brasil, pero ayer perdió con República Dominicana en lo que fue una gran sorpresa para este equipo. Los estadounidenses llegan golpeados, esperemos que la Albiceleste pueda aprovecharlo y que demuestre el gran juego al que nos tiene acostumbrados desde el Mundial de Suecia.

Nahuel Tassi